Un día en la vida: Los refugiados y sus historias
La situación de los inmigrantes y refugiados en EE.UU puede llegar a ser precaria y humillante, pero con la ayuda necesaria, puede terminar siendo un logro soñado por estas personas, Lincoln-Goldfinch Law quiere conscientizar sobre un dia en la vida de los refugiados.
American Gateways es una inspiradora organización sin ánimo de lucro que se dedica a proporcionar ayuda y representación legal a inmigrantes y solicitantes de asilo. A continuación se presentan algunas de las historias de los refugiados a los que American Gateways ha ayudado. Si desea contribuir a su misión, visite https://www.americangateways.org/.
María: América Central
María viajó sola -enfrentándose al riesgo de secuestro y abusos- desde Honduras a través de Guatemala y México para escapar de los atroces abusos de su pareja. Su maltratador ya la había localizado en repetidas ocasiones cuando intentó abandonarlo en Honduras. Las autoridades hondureñas no hicieron nada para protegerla. Tras pasar casi un año en un centro de detención a las afueras de Austin, fue puesta en libertad bajo fianza. AG trabajó con abogados pro-bono y presentó su petición de asilo político y, mientras espera el resultado final de su caso, está aprendiendo inglés, tomando clases en la universidad comunitaria, trabaja como gerente en Pizza Hut y juega en un equipo de fútbol femenino. Está prosperando: vive libre del miedo de su perseguidor en Estados Unidos.
Eduardo: México
Eduardo era un político de un estado rural de México cuyos partidos políticos estaban infiltrados por los cárteles de la droga. A medida que el protagonismo político y el poder de Eduardo aumentaban, se convirtió en el objetivo de los cárteles que buscaban dinero público e información sobre la actividad policial. Eduardo quiso hacer frente y se negó a sus crecientes exigencias. Los cárteles le amenazaron con la violencia y la muerte y un día cumplieron sus amenazas. Intentaron asesinarle a plena luz del día y secuestraron a su hijo. Eduardo escapó a duras penas con su familia. En colaboración con abogados pro bono, AG ha conseguido el asilo para varios miembros de la familia. Las solicitudes de otros miembros de la familia en condición de refugiados esperan y son prometedoras. Aunque nunca ha habido justicia contra los cárteles en México y su hijo nunca ha sido localizado, el resto de su familia se ha reubicado, ha abierto un restaurante y ha intentado empezar de nuevo su vida.
Jean: África Central
Jean es de África Central. Hija de una abogada y empresaria con fuertes conexiones políticas, Jean aprendió la importancia del compromiso político y los valores democráticos y se involucró en la política electoral. En la primavera de 2014, los servicios de inteligencia del Estado aprehendieron a Jean, le pusieron una capucha en la cabeza y la arrojaron a la parte trasera de un coche. La llevaron a un lugar secreto, donde la torturaron y la interrogaron sobre su participación política durante varios días. Tenía dieciocho años. Jean escapó a duras penas y se escondió en un país vecino durante varios meses, pero no fue suficiente. Tras meses escondidas, Jean y su hermana Marie consiguieron llegar a Austin, donde ahora van a la escuela. Su futuro en Estados Unidos sigue siendo incierto, pero AG ha encontrado abogados pro bono, ahora tienen representación legal y están comenzando el proceso de solicitud de asilo en Estados Unidos como refugiados.